Negro aforismo
No es la culpa, si no el grueso temblor que portamos. Las circunstancias se sacuden como rameras a plena luz del día y por las noches se desarman como arena. ¡Pero no! No hay de qué preocuparse. O se tiembla, o se tirita, o se sacude y nos estrujamos para que no lleguemos a la inevitable sucesión de hechos terribles. (Gracias por el delirio / Poemario inédito / Esteban Salinero)
Comentarios
¿Dijo Cultura?
A lugar!
¿Dijo o no?
A lugar te digo!!
Luego.
¿Luego?
¿Cultura?
¿Aquella concentración de pajaritos de jogurt?
A lugar!
A lugar!
Ah! ¿Cuál es el logo?
Hola logo!
Luego,
Ligo ligas.
Lego lagos.
¿Cultura, dijo?
Lugar, lugar. Casi casi Luger